Colectivo Generacion Amauta
“Queremos construir, organizar y hacer visible el partido más grande del país, capaz de ser el eje de un bloque social y político alternativo (…) haciendo participar en el a miles de personas, de hombres y mujeres concretos, que den lo mejor de sí para conseguir la gran transformación de nuestro país” Ollanta Humala Tasso 2006.
“Ninguna revolución del pasado conoció los partidos, ellos nacieron después de la revolución burguesa y se han descompuesto en el terreno de la democracia parlamentaria. Los partidos burocráticos servían para indicar y señalar hombres políticos de valor y hacerlos triunfar en la competencia política; hoy los hombres del gobierno son impuestos por los bancos, por los grandes periódicos, por las asociaciones industriales; los partidos se han descompuesto en una multiplicidad de sectas personales…Los partidos son el reflejo y la nomenclatura de las clases sociales. Surgen , se desarrollan ,se descomponen , se renuevan ,en función de que las diversas clases de las capas sociales en lucha sufren desplazamientos de dimensión histórica real, ven cambiados radicalmente sus condiciones de existencia y de desarrollo, adquieren una mayor conciencia de sí y de sus intereses vitales”Gramsci
El núcleo impulsor del Partido Nacionalista, desde su nacimiento, tuvo su rasgo de clase: el de la pequeña burguesía nativa que buscaba una mejor repartija en los negocios con el capital extranjero .Este sector cogió varios puntos programáticos de la izquierda y del pueblo. Antes del 2006 se discutía en todas las latitudes del país cuales deberían ser las acciones de un eventual gobierno distante a los neoliberales, razón por la cual la comisión del plan de gobierno del PNP alimento su programa con las propuestas del pueblo organizado. A partir de ello muchos elementos, especialmentejóvenes, decidieron incorporarse al nacionalismo porque veían de algún modo una “nueva” alternativa política frente al continuismo que expresaban las demás fuerzas políticas.
El Partido Nacionalista cubrió ese vacío que había dejado la izquierda por varios años, encontró a un pueblo que buscaba un camino y un programa que los represente; en este contexto de reavivamiento e las fuerzas sociales es que lograron posicionarse en la escena nacional.
Al interior del Partido Nacionalista se gestaba un ala conservadora, derechista y otra ala progresista, izquierdista. La pugna no dejo de evidenciarse en el proceso de alianzas políticas, elección de candidatos y elaboración de la táctica electoral. Con serias limitaciones organizas e ideológicas muchos militantes fueron alejándose por las pugnas internas y las excomuniones de un sector y de otro.
El sector más conservador es quien tomaba las decisiones finales, Es quien doblega la conciencia de los opositores con beneficios económicos, aplica sanciones disciplinarias por decreto y depura a los más “rebeldes “nacionalistas.Progresivamente dejaron el debate ideológico,programático y técnico para suplantarlo por el debate de puestos de trabajo en algún cargo estatal, los currículos inundaron las oficinas del partido en vez de las ideas; es decir, el partido aso a convertirse en una agencia de empleos. Es el ala derechista el que ha dado “la gran transformación” al programa político del 2006 hacia un programa neoliberal, es el que conduce al Partido Nacionalista y al gobierno a convivir con los sectores más conservadores y pro imperialistas,es las que dio cristiana sepultura a la confluencia Gana Perú por medio de decretos.
Si sus banderas iniciales conjugaban “la gran transformación “hoy solo queda la sombra de los oscuros pasadizos de locales sobrevivientes que el viento se lleva como arena. Conjugar el verbo luchar ya no cabe en el léxico de los altos dirigentes, quienes por decreto sancionan apoyar la lucha contra el proyecto Conga o que reorganizan sus bases imponiendo dirigentes ilegítimos e inmorales.
Estos señores han cruzado la otra orilla para conducir al Partido Nacionalista como un cuartel donde nada debe cuestionarse. Para el asombro de muchos, hay quienes siguen creyendo que a través de la Hoja de Ruta se llegará al Programa de la Gran Transformación ,ilusión que tratan de vender a los nacionalistas honestos que aún quedan en el interior, pero ¿quiénes garantizan este viraje?, ¿con què fines reales se cuentan para volver al programa inicial? Lo palpable es hoy que los altos dirigentes, incluido Ollanta Humala, han virado sin retorno a la derecha neoliberal, que la única forma de volver al programa inicial de la Gran Transformación es que el ala derechista sea depurada del nacionalismo y del gobierno, pero la realidad nos muestra que eso está muy lejos.
Los más iracundos izquierdistas, herederos del senderismo, saltaran de alegría al afirmar que tenían razón en sus consignas en campañas electorales anteriores. Sentimos decirles que están errados porque gracias a este escenario el pueblo ha dado un paso después de 20 años de estancamiento, porque hoy la gente exige que se cumpla el programa que ganó las elecciones y no el de los perdedores, hoy la gente se acerca nuevamente a la izquierda como alternativa política y no debemos permitir que la irracionalidad y el aventurismo destruyan lo avanzado.
Son esos mismos barbaros izquierdistas quienes pretenden lapidar a los núcleos socialistas que apoyan al nacionalismo, pues no han entendido nada de lo que han leído y piensa al igual que Guzmán que la realidad está equivocada. Sentimos decirles que sus disparates políticos son aplastados por la realidad, gracias a esto hemos constatado la podredumbre ideológica y política de algunos “socialistas” y hemos ganado nuevos sectores para el socialismo, muchos núcleos socialistas han afianzado sus relaciones (aun dispersas) camino al entendimiento a desaparecer como núcleos y a construir una gran organización nacional.
Queremos decirles a los nacionalistas que no deben dejarse ganar por la desilusión y que por lo contrario deben renunciar masivamente y sepultar al Partido Nacionalista para forjar una nueva organización política que exprese sus aspiraciones colectivas y las del país; profundizar y mejorar el programa de la “Gran Transformación” que hoy es insuficiente.
El país exige la unidad más amplia de los nacionalistas honestos y las fuerzas izquierdistas en un frente con puntos programáticos básicos que exprese las aspiraciones del pueblo peruano.
Lima, 29 julio 2012
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